Probablemente, la emoción con la que más les cuesta lidiar a los niños -y a los adultos- es la frustración. Que las cosas no salgan a la primera; que a veces no sean como esperamos; el hecho de que nos tenemos que esforzar -a veces mucho- y darnos cuenta de que aquello que deseamos no lo conseguiremos de forma inmediata, sino en el futuro, crea una sensación en la que -fundamentalmente- a veces domina la ira y a veces la tristeza, y que si no sabemos convivir con ella nos puede hacer pasar muy malos momentos, o lo que es peor, convertirnos en personas tremendamente amargadas. Para los niños, la frustración es una constante, ¡háblales de tiempo a los niños!, ¿qué es eso? Te dirán, ellos, que viven en el presente como ningún otro ser humano, que el tiempo es una medida extraña que no les dice nada claro, ¿qué es una hora para un niño? ¿qué es un año?. Ellos, que creen en la magia, que lo ven todo hecho, que las cosas están a su disposición, pero ¡ay amigo! Para que salgan, muchas de ellas hay que aprenderlas, hay que ganárselas… Controlar la frustración, aceptarla y trabajarla es lo que les va haciendo, poco a poco, adultos. En La Casita de Inglés concebimos la enseñanza del inglés de manera transversal. Además de con juegos y manualidades, con los que aprenden vocabulario y gramática, creemos que es fundamental ayudarles a encontrar las herramientas y motivaciones necesarias para su educación emocional, pues entendemos que, si bien los padres son los principales agentes de la educación de sus hijos, la sociedad adulta en su conjunto, debe ser responsable de todos y cada uno de sus niños y niñas. Acompañarlos en su camino por una infancia feliz para que se conviertan en adultos conscientes, responsables y maduros, es parte de nuestra responsabilidad como sociedad en general y como maestros en particular. Al hacerlo en inglés, interiorizan esta lengua no sólo como una herramienta para realizar actividades, sino también para poder tratar emociones. Estos días estamos abordando el tema de la frustración. Hemos de decir que la maravillosa literatura infantil existente nos lo pone fácil; por eso, nuestro storytelling de hoy es sobre Everyone can Learn to Ride a Bicycle, un fantástico libro ilustrado de Cris Raschka que ahonda en la necesidad de caernos y levantarnos una y otra vez, y cómo sólo así, teniendo confianza, tesón y por supuesto, volviendo a intentarlo, acabamos aprendiendo a montar en bicicleta o a cualquier otra cosa en la vida. El libro, además de maravillosamente escrito, es una belleza en todos los sentidos, que nuestra profe Chantelle sabe transmitir a su clase de los más pequeñines de La Casita. Estos días queremos trabajar en profundidad el tema de la frustración, si vosotros también queréis hacerlo en casa, podéis apoyaros en algunos de estos libros que consideramos inspiradores y emocionantes: Ish y The Dot, ambos de Peter H. Reynolds; estos libros ayudan a romper el muro del “no soy capaz” especialmente en lo referente al mundo del arte. Con unos dibujos sencillos y cercanos, Reynolds nos hace ver -porque aunque sean para niños, muchos adultos podemos vernos perfectamente reflejados- cómo la mayor parte de las veces, el miedo al lienzo vacío o a una mala crítica nos bloquea y no nos permite ver todo aquello de lo que somos capaces. En la misma línea se encuentra The Most Magnificent Thing de Ashley Spires, en este caso, su autora nos presenta a una niña que quiere fabricar el objeto más maravilloso del mundo; esta niña, segura y confiada, tiene que sobreponerse a varios fracasos antes de conseguir crear ese objeto tan maravilloso que tiene en mente. The Girl Who Never Made Mistakes, -de Mark Pett y Gary Rubinstein- también transmite una idea muy interesante a los más pequeños: no pasa nada por cometer errores, de hecho, es saludable y humano cometerlos tantas veces como sea necesario. Los errores no nos hacen pequeños, sino grandes. Finalmente, para los más pequeñitos, el libro Beautiful Oops! de Barney Saltzberg introduce a los pre-lectores en las grandes posibilidades que se encuentran detrás de un error. María Blanco Brotons es periodista, especializada en temas infantiles que además de haber colaborado con la revista Ser Padres, Naif Magazine, Madrid diferente con niños o el blog de Kideeo, llevó durante casi seis años ¡glück! un mágico espacio infantil en el centro de Madrid. #planesparaniños #cuentoinfantil #niñosbilingües #inglésdivertido #inglesjugando #ingléspozuelo #inglesmajadahonda #ingleschamberi #inglesmontecarmelo
